Los derechos humanos
Los derechos humanos son derechos inherentes a todas las personas. Definen las relaciones entre los individuos y las estructuras de poder, especialmente el Estado.
Delimitan el poder del Estado y, al mismo tiempo, exigen que el Estado adopte medidas positivas que garanticen condiciones en las que todas las personas puedan disfrutar de sus derechos
Origen de los derechos humanos
La historia de los últimos 250 años ha sido moldeada por los esfuerzos realizados para crear esas condiciones.
Comenzando con las revoluciones francesa y americana a finales del siglo XVIII, la idea de los derechos humanos ha inspirado más de un movimiento revolucionario encaminado a dar poder efectivo a los ciudadanos y control sobre los que ostentan el poder, en particular los Gobiernos.
Los Gobiernos y otros titulares de deberes tienen la obligación de respetar, proteger y cumplir los derechos, que constituyen la base legal para la reivindicación de derechos y la demanda de reparación en caso de incumplimiento.
En realidad, la posibilidad de demandar y exigir reparación es lo que distingue a los derechos humanos de los preceptos propios de los sistemas de valores éticos o religiosos.
Desde un punto de vista jurídico, los derechos pueden definirse como la suma de derechos individuales y colectivos reconocidos por los Estados soberanos y consagrados en su legislación nacional y en las normas internacionales de derechos humanos.
Desde la Segunda Guerra Mundial, las Naciones Unidas han desempeñado un papel de primer orden en la definición y la promoción de los derechos, que hasta entonces habían tenido lugar principalmente dentro del Estado-nación.
El resultado es que los derechos han quedado codificados en diversos tratados e instrumentos internacionales y regionales que han sido ratificados por la mayoría de los países.
Hoy en día, representan el único sistema de valores universalmente reconocido