Como inicio la Segunda Guerra Mundial
La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) ha sido uno de los conflictos más cruentos en los que se ha visto involucrada la humanidad.
En esta guerra no solo perdieron la vida cerca de 60 millones personas, sino que gran parte fueron víctimas civiles: niños y niñas, hombres y mujeres, jóvenes y ancianos, que murieron en bombardeos a ciudades, o bien, fueron exterminados en campos de concentración.
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Para muchos historiadores, el término de la Primera Guerra Mundial fue en realidad el inicio de la Segunda, ya que con el Tratado de Versalles, en 1919, no lograron resolverse equitativamente los problemas entre las diferentes potencias, generándose incluso nuevos conflictos.
Por un lado, el Tratado de Versalles provocó un gran resentimiento y descontento en Alemania, por la obligación de pagar indemnizaciones de guerra que superaban absolutamente sus posibilidades económicas.
Por su parte, los italianos se sentían defraudados al no ser beneficiados con territorios que esperaban recibir.
En ambos países se inició un fuerte nacionalismo, acentuado por la compleja situación económica derivada de la crisis del capitalismo mundial, todo lo cual culminó con la llegada de gobiernos totalitarios al poder.
En este contexto, Alemania, Italia y Japón iniciaron una agresiva política expansionista en Europa y Asia, ante lo cual los países europeos se mostraron expectantes.
Francia e Inglaterra miraban con recelo a Alemania, pero su anticomunismo ofrecía un contrapeso al avance de la URSS.
Esta última consideraba que un posible conflicto entre Estados capitalistas podría favorecer la difusión del comunismo en otros países.
La Sociedad de Naciones se mostró incapaz de detener a las potencias expansionistas, que terminaron retirándose del organismo internacional.
Mientras, Estados Unidos mantuvo su política aislacionista, concentrando sus esfuerzos en la reactivación de su economía.
En 1936, los gobiernos de Hitler y Mussolini establecieron un acuerdo político y militar para brindarse apoyo mutuo, consolidando la gran cercanía ideológica de ambos regímenes.
A este pacto se unió Japón, en 1940, conformando el eje Roma-Berlín-Tokio, alianza que hizo que estos países fueran conocidos como potencias del Eje.
El 1 de septiembre de 1939, Hitler invadió Polonia utilizando la estrategia de la “guerra relámpago”, cuya clave era el factor sorpresa y la movilización de un gran contingente militar de fuerzas terrestres y aéreas.
Francia e Inglaterra, aliadas de Polonia, vieron agotada la política de apaciguamiento, y días después declararon la guerra a Alemania. Así se inició la Segunda Guerra Mundial.
La etapa europea y las victorias de Alemania (1939-1942)
Los tres primeros años de guerra se caracterizaron por los sucesivos triunfos militares y las rápidas conquistas territoriales de las potencias del Eje. A esta etapa se le denominó “La guerra relámpago”, donde se produjo:
- Invasión a Polonia y reparto del país, según acuerdos establecidos entre Hitler y Stalin.
- Invasión a Dinamarca y Noruega, en abril de 1940.
- Ataque y ocupación de Bélgica, Holanda y mitad septentrional de Francia, en mayo de 1940. París es ocupado, y el territorio francés se divide en dos: el norte, controlado directamente por Alemania, y el sur, bajo el llamado Gobierno de Vichy, subordinado a Alemania, con el Mariscal francés Philippe Petain al frente.
Desde Londres, el General Charles de Gaulle llama a todos los franceses a enfrentar a los alemanes y a comenzar la resistencia contra el invasor.
La etapa mundial y la ofensiva aliada (1942-1945)
Esta etapa se inicia con el ataque sorpresivo de Japón a Pearl Harbor, base militar norteamericana en el océano Pacífico, lo que provocó la entrada a la guerra de Estados Unidos.
Mientras que la operación japonesa parecía colmar las ambiciones imperialistas de Japón en Asia, se consolidaba la gran alianza entre Inglaterra, Rusia y EE.UU.
Norteamérica dispone de un plan de socorro para Inglaterra, por el Atlántico, y para Rusia, desde Irán y China.
Durante la primera mitad de 1942, los ataques japoneses en el Pacífico consiguen ocupar Hong-Kong, Filipinas, Singapur, Indonesia y amenazar a Australia.
Pero desde mediados del mismo año la situación se vuelca a favor de los aliados. Las batallas navales de Midway, Mar del Coral y Guadalcanal ponen de manifiesto la superioridad de Estados Unidos.
Las conferencias y acuerdos de paz
Mientras duró la guerra, los países aliados se reunieron en varias oportunidades, para determinar estrategias y establecer acciones a corto y mediano plazo.
En enero de 1943, se reúnen en Casablanca (ciudad donde se reunían los gobernantes de EE.UU. e Inglaterra), Franklin Delano Roosevelt y Winston Churchill quienes decidieron la campaña de África y el posterior paso a Italia, vía Sicilia.
Tambien en octubre del mismo año, reunidos en Moscú, deciden la sustitución de la Sociedad de Naciones por una nueva organización mundial, y se estudió el desembarco de tropas aliadas en Francia para dividir las fuerzas de Alemania y bajar la presión del frente soviético.
En Teherán, en noviembre de 1943, Churchill, Roosevelt y Stalin decidieron que después de la guerra Japón tendría que devolver a China todos los territorios ocupados.
Consecuencias políticas e ideológicas de la Segunda Guerra Mundial
Este término de “lesa humanidad” se utiliza en los distintos procesos de Nuremberg como respuesta a la insuficiencia de la categoría Crimen de Guerra, que solo se podía aplicar a acciones contra combatientes enemigos y que dejaban fuera los crímenes a personas civiles pertenecientes al mismo país o a países neutrales.
En julio de 1998, este término se incorpora al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, donde se establece que estos delitos atañen tanto a los Estados como a las organizaciones políticas autónomas que actúan al interior de los distintos países en el marco internacional.